FOTO: Playa de Es Trenc (Mallorca).
Vuelta a La Araña. Desnivel entre la arena y la orilla. El agua, caliente, casi como en la mallorquina Es Trenc. Un chill-out, con mesas blancas y camas estilo balinés, escoltan la mirada en el atardecer del extremo oriental de la ciudad. El sol entra y desaparece. Se nubla, languidece, como el verano. Fin de agosto.