El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ante la sombra de Manuel Chaves.
«Lo llamaban régimen. El régimen Chavista. O Chavesato. El rostro de Manuel Chaves es el del único mandatario andaluz que identifica al instante el imaginario de cualquier joven sureño de menos de 20 años. Cuando nacieron (son nombres ficticios) Paula, de Matalascañas (Huelva), o Juan, de Úbeda (Jaén), ya era el jefe de Andalucía. Chaves sigue controlando el PSOE-A, pero el Día del Libro de 2009 dejó un cargo que parecía vitalicio y diseñado a su semejanza: la Presidencia de la Junta de Andalucía».