En el capítulo de despilfarro, el alcalde malagueño Francisco de la Torre se ha destapado como un excelente imitador de Griñán en el caso del suntuoso Plan Renove del Palacio de San Telmo. El Ayuntamiento de Málaga se gasta 34 millones de euros en un edificio que albergará las dependencias de la Gerencia de Urbanismo, Tráfico, Polígonos y Accesibilidad. Sólo en equipamiento de muebles se gastará 260.000 euros. La mudanza se dispara a los 120.000 euros.