Rosa Aguilar quiere gobernar el Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino a golpe de efecto. Y sin duda uno de los principales sería el derribo del hotel Algarrobico, icono del desastre urbanístico en el litoral español. Su anuncio del fin de esta mole ubicada en la costa almeriense se trata en realidad de un farol. El Algarrobico no desaparecerá “como mínimo hasta dentro de seis años”, según denuncia a este diario la organización ‘Salvemos Mojácar’.
La historia que escribo hoy en El Confidencial.