Antonio Fernández, ex consejero de Empleo del Gobierno andaluz, tiene todas las papeletas para convertirse en el cabeza de turco de la trama de EREs irregulares aprobados por la Junta de Andalucía. El Ejecutivo andaluz intenta echar el muerto del supuesto fondo de reptiles a Fernández, fulminado por José Antonio Griñán en marzo de 2010.