Cuando Ezequiel Teodoro se levantó, Barack Obama había ordenado matar a Osama Bin Laden. La Operación Gerónimo liderada por Obama llegó tarde esa mañana del 2 de mayo. Teodoro lo asesinó un mes antes. El manuscrito de Avicena, la primera novela del ex jefe de Prensa de Magdalena Álvarez, se publicó en abril. Y en sus páginas Bin Laden ya no era el líder de Al Qaeda y estaba muerto.
“Me quedé paralizado cuando supe de la noticia”, confiesa el periodista ceutí de 39 años. La obra la empezó a escribir en 2008 y desde el primer momento (aunque “sin una estructura previa”) quiso matar al terrorista más buscado del planeta. “Creé al personaje sucesor de Bin Laden como totalmente ficticio, pero he intentado que sea creíble”.