El presidente del grupo BBK, Mario Fernández (i) y elpresidente ejecutivo de CajaSur, José Carlos Plá (Efe).
Los directivos de BBK Bank Cajasur han decidido dar marcha atrás con el ERE planteado el pasado mes de marzo tras darse cuenta de que éste era exagerado. El plan en la entidad contemplaba 240 despidos, de los que 89 han sido voluntarios y 151 obligatorios (el 90% entre 43 y 53 años), para lograr un ahorro en personal de entre 40 y 45 millones de euros.
Meses después han sido conscientes de su error: falta plantilla, hasta el punto de que algunos departamentos se han quedado sin personal. Y los empleados a los que ahora les tocaba prejubilarse se quedarán sin el tesoro acordado: el 87% del sueldo más 30.000 euros lineal. “Se han pasado con los recortes, han improvisado claramente”, confirman a este diario fuentes cercanas a Cajasur. Mientras, Juan Manuel Bejarano, ex director de Inversiones, el cerebro del fracaso de la antigua Cajasur (que obtuvo pérdidas en 2010 de 1.100 millones de euros) continúa dirigiendo el departamento de Recursos Humanos.
