En tiempos de tribulaciones financieras, Braulio Medel continúa haciendo cambios en la nueva Unicaja. Medel, el dirigente más histórico del sistema financiero español, capitanea la fusión por absorción con Caja España-Duero, pero aún le queda tiempo para seguir moviendo piezas internas que refuercen su guardia pretoriana de extrema confianza. ¿El objetivo? “Hacerse fuerte en Unicaja ante el posible cambio político en Andalucía”, destacan a El Confidencial fuentes financieras andaluzas.
Felipe Faraguna, cuñado de presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha dejado su puesto de director general de la Obra Social Cultural para dedicarse a la dirección de RSE (Responsabilidad Social de la Empresa) que en la mayoría de las compañías responde al nombre de RSC (Responsabilidad Social Corporativa). Medel ha elegido a su directora de Gabinete, María Dolores Cano, nueva responsable de la Obra socio cultural. Cano no ha dejado su cargo de jefa de Gabinete. José Manuel Domínguez, director de la división de secretaría técnica, también ha asumido “más funciones, con mayor responsabilidad en el control de gastos” de la entidad.
El salario anual de Medel, uno de los grandes secretos de la banca española, ya ha dejado de serlo tras aprobar el consejo de administración del pasado jueves un blindaje por un periodo de dos años de 1,2 millones de euros en caso de despido. El presidente de Unicaja Banco, según confirmaron varias fuentes a este diario, se sitúa en los 600.000 euros anuales. En la entidad insisten en que la indemnización de Medel no es sólo para el presidente, sino para los cargos ejecutivos. “No es una cuestión escandalosa, por debajo de la media de otras entidades españolas, pero no había necesidad de aprobar un blindaje en el consejo”.
El consejo de administración también aprobó las dietas de los consejeros por asistencia a los consejos, un mínimo de 30.000 euros anuales. Antes se cobraba por asistencia. El pasado jueves faltó la socialista Marisa Bustinduy, miembro de la Mesa del Parlamento andaluz, seguidora de Carmen Chacón, y exsecretaria provincial del PSOE malagueño.
¿A buen ritmo la absorción de Caja España-Duero?
Aparte de las dietas y blindajes, no existe unanimidad con el ritmo del proceso de fusión por absorción de Caja España-Duero por parte de Unicaja. El comunicado de prensa de la entidad habla de “normalidad”. Fuentes oficiales de la caja malagueña consultadas por El Confidencial subrayan: “Todo está a punto: no hemos perdido ni un minuto. El viernes lo aprobó la SIP la Junta de Castilla y León. Esperamos un anuncio de la reforma del sector financiero en el próximo Consejo de Ministros que podría acelerar aún más todo el proceso. Aquí hay que hilar muy fino, vamos absolutamente a tiempo, sin retraso”. Fuentes financieras andaluzas precisan que el proceso va “lento” por la parsimonia y “absoluto control” que Medel impone en la gestión diaria.
Lo que nadie duda es que Unicaja, que no ha comercializado ningún tipo de participaciones preferentes, está llamada a más procesos de fusión. “Pero primero hay que terminar esta fusión y hacerla bien, con todas las garantías”, insisten a este diario fuentes oficiales de la entidad que subrayan la escasa tasa de morosidad de la entidad (4,75%), lo que permite a la entidad “seguir situándose entre las entidades con menor morosidad del sector”.
Unicaja Banco cerró el ejercicio 2011, según un avance de datos, con un volumen de negocio de 62.000 millones de euros. Los recursos administrados ascienden a 34.800 millones de euros, con un aumento interanual del 5,2%, mientras que el total de crédito a la clientela fue de 27.200 millones de euros, con una variación prácticamente nula sobre el año anterior. El activo total, por su parte, registró un incremento del 12,8%, hasta alcanzar la cifra de 38.830 millones de euros.