Javier Arenas soñaba estos días con preparar la mudanza al Palacio de San Telmo. En su cuento de la lechera de su llegada al Gobierno andaluz ya daba por descontado que se encontraría con muchas facturas sin pagar. El PP andaluz ha hecho las cuentas y acaba de contabilizar la deuda a proveedores de la Junta de Andalucía: 4.500 millones de euros.
Cinco días antes de las elecciones autonómicas del 25-M, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, cifró en 3.000 millones de euros esta deuda. Montoro se remitía a los datos aportados por Eurostat, la oficina estadística de la Unión Europea. Esta deuda de 3.000 millones de la Junta se asemejaba a la de los ayuntamientos andaluces con proveedores: 2.800 millones, el 29% de todo el país.
