El escritor Arturo Pérez-Reverte (Efe).
Cada domingo por la tarde Arturo Pérez Reverte se desfoga en Twitter con comentarios libérrimos, la mayoría políticamente incorrectos. Ayer le tocó a Sevilla. “Maderos, yonquis, putas y gentuza. La vida misma. La Sevilla real. La que incomoda y nunca saldrá en el ¡Hola!”. El escritor se refería a la película Grupo 7, dirigida por Albert Rodríguez, que retrata la Sevilla preExpo92.
“Es Sevilla más real que ese otro camelo de ferias de abril, semanas santas y rocíos varios que nos venden a diario”, apunta Pérez Reverte, quien relata que el sábado vio la película y no ahorra elogios a la cinta. “Ayer estuve viendo Grupo 7. Me gustó mucho. La película, en mi opinión, es soberbia. Tan buena que no parece española”.
En su cuenta de Twitter el académico de la Lengua Española también ha tildado a Sevilla de “cutre”. “Era así en el 92 y lo sigue siendo”, apunta Pérez Reverte, que ante la ingente cantidad de interacciones negativas a sus comentarios sobre la capital andaluza publicó en Twitter un link de un artículo de Antonio Burgos de octubre de 2004, publicado en ABC, en el que el columnista sevillano bendice al creador de la saga de El capitán Alatriste.
El texto al que se refiere Burgos es el siguiente: “La Semana Santa, la Feria, el Betis no son la Sevilla a la que me refiero. Cuando digo que la amo, hablo de una conversación sorprendida en un bar, de dos señoras charlando con el carrito de la compra volviendo de la plaza, unos amigos cenando en Casa Becerra o ver amanecer frente a la Maestranza y sentirse como Juncal”. Y Burgos le contesta: “Bingo. Una Sevilla sustancial, con mucha América dentro, con mucho río, mucho silencio de cal, de patio, de siesta, de piano de una solterona que llora con un vals de Chopin amores que se fueron a Cuba”.
Pérez Reverte, que ha interactuado con una veintena de tuiteros sobre sus comentarios sobre Sevilla, también ha publicado en su cuenta de Twitter el enlace de un artículo publicado en XL Semanal llamado El ombligo de Sevilla: “Siempre que viajo allí me pregunto lo que podría ser esa ciudad si dejara de mirarse en su espejo autista y se abriera al mundo con la cultura como reclamo y bandera. Hablo de la cultura de verdad, no de la caduca soplapollez de diseño que pretenden vendernos políticos y mangantes en busca de la foto y el telediario del día siguiente, o del folklore demagógico y sentimental con el que quienes manejan el cotarro pretenden –y lo consiguen desde hace siglos– llevarse al huerto a la ciudadanía”.
Los comentarios de los tuiteros son constantes. Los hay que recuerdan su novela La piel del tambor, ambientada en Sevilla: @kurt_godel escribió: “Sevilla real la de su Piel del Tambor, aun recorro los bares de Triana” o @aosunama “Nadie puede inventar una ciudad como Sevilla #lapieldeltambor :-). Otros son críticos como @Gonzalo_Gragera: “La Sevilla que ud. comenta no es la que veo yo a diario. Le rectifico, porque me duele y que conste, no soy sevillano. Btardes”.
El link de la información que acabo de publicar en la portada de El Confidencial, la tercera más leída del día (y eso que se subió a la portada a las 16.49 horas).