Sin competencia. José Antonio Griñán aspira desde este viernes a la reelección como líder del socialismo andaluz con una mayoría a la búlgara. Sus críticos presentarán batalla soterrada, quizá aparezcan voces discrepantes de provincias díscolas como Cádiz o Jaén, pero Griñán sellará sin problemas su continuidad como secretario general del PSOE andaluz.
¿Y cuál es el interés del congreso regional que se celebra este fin de semana en El Toyo (Almería)? La correlación de las fuerzas internas. Y conocer hasta qué punto Griñán será capaz de elaborar una lista de integración de todos los sectores y facciones, agrupando a todas las provincias, o si repite el modelo de 2010: diseñar una Ejecutiva a su imagen y semejanza que desencadenó en un terremoto interno sin precedentes en los socialistas sureños.