Nada importante, ni siquiera poco importante, se movía sin que Gaspar Zarrías lo supiera. La respuesta fetiche de Manuel Chaves era esta: “Eso pregúntaselo a Gaspar”. Por eso, no extrañó ayer que cuando la parlamentaria de IU Alba Doblas le dijera en la comisión que investiga los ERE al exvicepresidente de la Junta de Andalucía que él era el todopoderoso Zarrías, éste no rechazara ese apodo. No se inmutó y, es más, pareció gustarle la denominación.
“Usted era el todopoderoso”, le indicó Doblas y el exnúmero 2 de la Junta de Andalucía bromeó: “El medio metro, bueno, mi 1,61 no da tanto de sí”. Zarrías en estado puro. El miembro de la Ejecutiva Federal del PSOE compareció ayer con una hora de retraso en la comisión de los ERE del Parlamento de Andalucía. Lo hizo justo después de la negativa de los socialistas a que mañana viernes intervinieran José Antonio Griñán y Manuel Chaves.
Zarrías sabía muy bien lo que pasaba en su Consejería de Presidencia, pero ignoraba que existía la partida 31L, el llamado fondo de reptiles de la Junta de Andalucía. Llegó a decir que él carecía de cualquier responsabilidad política en este caso, aunque se reuniera con los exconsejeros José Antonio Viera y Antonio Fernández para hacerles ver la necesidad de invertir en determinadas zonas o empresas.
Puso el ejemplo de Santana Motor, la compañía ubicada en Linares (Jaén), el mayor fracaso industrial en la historia de la Junta tras invertir 600 millones de euros en 15 años. En este momento recurrió a la guasa: “¿Ahora se dice trending topic? No soy muy experto en nuevas tecnologías, pero sí puedo decir que Santana sí ha sido muchas veces trending topic en este Parlamento”. En este punto Zarrías admitió que había soportado muchas críticas tanto externas como dentro de sus propio partido recriminándole que se volcara en demasía en las ayudas a Jaén, su provincia natal, y cuya federación socialista controla con mano férrea desde hace más de dos décadas.
“Chaves o Griñán no conocían todo al dedillo”
El PP le preguntó cómo era posible la falta de procedimiento de 1.500 millones de euros, la cantidad a la que asciende el fraude de los ERE. “Se ha utilizado un programa absolutamente legal de manera presuntamente ilícita”, resaltó. Después, precisó que en su etapa de vicepresidente la Junta de Andalucía tenía un presupuesto de 33.000 millones de euros. “Es una frivolidad que alguien pretenda que Chaves o Griñán conozca al dedillo todos y cada uno de los procedimientos de la Junta, eso es imposible. Ni el todopoderoso [lo sabía]”, se refirió al él mismo tras la pregunta del portavoz parlamentario del PP, Carlos Rojas.
Gaspar Zarrías negó en su declaración que se hubiera entrevistado con Francisco Javier Guerrero, exdirector general de Empleo de la Junta, ni con cualquier otro director general de otra consejería que no fuera la suya. “Yo no voy a entrar en lo que ha dicho Guerrero y sí les voy a decir una cosa: el señor Fernández [el exconsejero Antonio Fernández] es un amigo mío. Lo era, lo es y lo será. Hizo un buen trabajo en Empleo y hoy me reafirmo que fue un buen consejero”.
“¿Le sugería las ayudas al señor Fernández, a quién había que darles las ayudas?”, preguntó Rojas a Zarrías. “¿Es que somos sordos o estamos ciegos?”, replicó Zarrías, quien añadió: “Al señor Fernández yo no le di directrices políticas”. Para terminar, el exvicepresidente del Gobierno añadió: “Esta comisión es una causa general contra el PSOE y los Gobiernos socialistas. Todo esto es [la investigación parlamentaria de los ERE falsos] es secundario, todo el objetivo del PP era gobernar Andalucía, pero en marzo los andaluces los frustró. ¿Hasta dónde están dispuestos a llegar? El objetivo no es llegar a la verdad, sino dinamitarla. En política no vale todo, ustedes son ya mayorcitos”.
Polémica comparecencia de Zoido
En la sesión de la tarde, el presidente del PP andaluz y alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, intervino en calidad de exdelegado del Gobierno en Andalucía y como presunto mediador en cinco EREs de empresas de la comarca onubense de la faja pirítica que consiguieron ayudas extraordinarias del Gobierno andaluz. “No hay ningún intruso en esos expedientes y no lo digo yo, sino que lo dice la Junta de Andalucía en este informe”, lo dijo enseñando el documento a los diputados de la comisión y para que la cámara lo reflejara.
La documentación de estos expedientes llegó apenas una hora y media antes de la comparecencia de Zoido. Fue un debate muy intenso, un continuo rifirrafe. “No mienta a esta comisión”, le indicó Antonia Moro, portavoz del PSOE, al exdelegado del Gobierno andaluz. “Hay que estudiar más”, le replicó Rafael Carmona, portavoz del PP. “Viene con muchas cajas y con poca información”, insistió Moro. Todo acabó a gritos. “¡No lo habéis leído! ¡Hay que estudiar bien toda la documentación!”, vociferó un miembro del PP a PSOE e IU. José Antonio Castro, el portavoz de IU, calificó todo de “mofa”.