A estos nombres se les une Mercedes Mengíbar, exdoctora del hospital Virgen del Rocío de Sevilla y exgerente del hospital Comarcal de Antequera, quien desde hace un año ejerce las funciones de gerente del hospital privado Xanit de Benalmádena, uno de los más avanzados tecnológicamente de Andalucía. Antonio Pérez Rielo, que en mayo de este año dejó su cargo de gerente del hospital Carlos Haya para volver a trabajar en la UVI de este centro de referencia sanitario andaluz, podría estar estudiando ofertas del sector privado, según aseguraron distintas fuentes médicas.
El Confidencial publicó en noviembre de 2011 que ex altos cargos de Salud de la Junta de Andalucía buscaban refugio en la sanidad privada ante la previsible victoria de Javier Arenas en las elecciones autonómicas de marzo de 2012. Ahora no es el caso. La nueva política del SAS de aunar en una misma persona la gerencia de varios centros hospitalarios y la rebaja en el sueldo son las causas de este abandono de la sanidad pública. Sólo la provincia de Málaga concentra el 40% de la oferta sanitaria privada andaluza.
El Servicio Andaluz de Salud está ‘tirando’ de gerentes de su propia cantera, pero con menos experiencia de gestión. Y los cerebros huyen a la privada, que les seduce con mejores condiciones económicas y con bonus que producen de media hasta un 20% de más sueldo anual. «Es bastante grave que gente de mucho talento esté abandonando lo público. Eso debe producir una llamada de atención, mucho más conociendo que la sanidad privada está creciendo en Andalucía», señalan a este diario fuentes del SAS, que capitanea José Luis Gutiérrez desde hace cinco años.
La joint venture de USP con los hospitales Quirón ha supuesto también una revolución en el sector. A esta circunstancia se le añade el descontento generalizado de los profesionales, faltos de motivación por los recortes de la sanidad pública andaluza. Ayer mismo empezó una huelga de médicos residentes por la escasa retribución y la inseguridad jurídica de sus puestos.
Juan José Sánchez Luque, presidente del Colegio de Médicos de Málaga, también lamenta cómo un buen número de profesionales de la medicina de la provincia y de Andalucía se están yendo a otras comunidades autónomas, donde se les paga mejor y pueden desarrollar su carrera sanitaria. Luque quiere insistir en la fuga de cerebros de médicos jóvenes que encuentran trabajo fuera de España. «Vamos a tener una plantilla de médicos envejecidos. Dentro de poco no tendremos banquillo, lo lamentaremos décadas», precisa Luque en declaraciones a El Confidencial.