El caso ERE empezó aquí, en estas antiguas instalaciones ubicadas junto al Hipercor de Sevilla Este, en el kilómetro 1 de la carretera Sevilla-Málaga. Mercasevilla huele a pescado, carne, fruta y hortaliza. También a Cruzcampo de barril recién tirada. Y a la presunta corrupción que investiga la juez Mercedes Alaya. A Manuel, Ángel y X-men[el último no quiere desvelar su nombre y lanza lo de X-men porque lo dice su camiseta negra], de 56, 37 y 34 años, conductores de camiones, les apesta que el nombre de este mercado de abastos se asocie a corrupción. La cervecita fresca del mediodía ayuda a olvidar la miseria moral que azota esta Andalucía fustigada.
En el Mercabar (el bar de Mercasevilla), Juan Francisco Algarín Lamela, testaferro de Juan Lanzas, le daba dinero en presencia de Daniel Ponce (exdirectivo de Mercasevilla condenado por este caso). El trío de autónomos ofrece su propia interpretación del caso de los ERE. “Son todos unos sinvergüenzas, unos más y otros menos, pero esto de Guerrero, el chófer y Lanzas nos ha creado a los andaluces mala fama”, apunta Manuel, autónomo, como sus dos compañeros de volante. Ángel siempre votó al PSOE “por herencia”, apostilla X-men, “pero ya llevo cinco años sin votar. Ahora soy apolítico”, confiesa Ángel.
La gente está invirtiendo en un sitio que se ha quedado muy antiguo y que tendría que hacerse todo de nuevo. Por una nave por la que antes te podían pagar 270.000 euros ahora ya no te dan ni 18.000 euros“Siempre habrá golfos, pero al final sólo meten en la cárcel a quien roba 1.000 pesetas; nunca pasa nada para el que roba 1.000 millones”, se lamenta Manuel. X-men tiene una teoría nada optimista: “Como todos los partidos roban, hay que votar a quien crees que te va robar menos”. Ya van por la segunda Cruzcampo. La cajetilla de Winston también mengua conforme avanza la conversación.
Dentro del bar, con un menú que cuesta 7,50 euros y una tapa del día de apenas un euro, un empresario sevillano de unos 40 años abunda en cómo en el caso Mercasevilla Fernando Mellet, exdirectivo del mercado de abastos, y Rodrigo de Torrijos, exteniente de alcalde con Izquierda Unida, se repartían el negocio en el mercado de abastos. Mellet y Torrijos compartieron una suculenta mariscada en Bruselas. “La gente está invirtiendo en un sitio que se ha quedado muy antiguo y que tendría que hacerse todo de nuevo; el Hipercor, que creía que esto iba a estar lleno de pisos, está ahogado en su crecimiento y por una nave por la que antes te podían pagar 270.000 euros ahora ya no te dan ni 18.000 euros”, explica.
Corrupción “a estilo compadre”
El taxista que lleva al reportero de Mercasevilla a la avenida de Hytasa, la sede de la antigua Consejería de Empleo, apunta: “En Andalucía hay la misma corrupción que hay en Madrid con Bárcenas o de Urdangarín en Mallorca y Valencia, pero aquí lo hacemos a estilo compadre”. El conductor podría poner el ejemplo de la entrega de sobres en los bares de los alrededores del Polígono de Hytasa, cerca del teatro Salvador Távora.
Según recoge el sumario del caso de los ERE al que ha tenido acceso El Confidencial, Algarín entregaba en el bar La Esquina de Hytasa (anteriormente denominado El Pilar) sobres de dinero a Lanzas en billetes de 200 y 500 euros. “Yo no vi nada, de eso hará ocho años o más, pero la verdad es que no me llama mucho la atención. Al final todo el que tiene poder se lleva dinero al bolsillo. Lo que me gustaría es que devolvieran todo lo que se llevan, pero yo no veo que lo hagan”, argumenta Manolo, de 64 años, encargado del bar desde hace tres años.
“Lo mejor es oír, ver y callar. Como no se sabe de qué parte está uno u otro, lo mejor es callar. Yo creo que la política es para los políticos. Son ellos los que viven de ella”, resalta Manolo, mientras Informativos Tele 5 anuncia el definitivo cierre de la Televisión pública de Grecia.
En el restaurante Cabo Roche, regentado por Paco Jacquot en la avenida Ramón y Cajal esquina con la avenida San Francisco Javier, no se entregaban sobres, pero solían almorzar Francisco Javier Guerrero y Juan Francisco Trujillo, el chófer de la cocaína. El exdirector general de la Junta comía lo justo, nada de comilonas. Lo que más le gustaba era el plato de cuchara. Le entusiasmaban las lentejas de la casa y la tortilla de harina con pan rallado. Guerrero no ha vuelto a ir por Cabo Roche, el pasado miércoles por la tarde a tope de gente.
Gintonics en ‘El Caramelo’ y ‘El Birdie’
Cruzando la acera en la zona de La Buhaira (Nervión) se encuentra el bar El Caramelo, donde se reunían para tomar copas Guerrero y su chófer, el ministrode las tragaperras, como le denominan en Llanos del Sotillo (Andújar). El Caramelo lleva cerrado un par de semanas por el inicio de la temporada veraniega. El Birdie, situado al lado, y del mismo dueño, sí está abierto. Treintañeros toman vespertinosgintonic no subvencionados (también la bebida favorita del “jovial, pero no putero”) y hablan, con fondo de música actual, de contratos y acuerdos comerciales. El termómetro sevillí ya trepa hasta los 35 grados.
En el barrio de La Macarena, los parlamentarios abandonan sus escaños en pleno debate de los ERE. Es el caso de Ignacio García, vicepresidente de la cámara autonómica y presidente de la frustrada comisión de investigación, que se va en busca de su coche oficial,uno de los diez con los que cuenta el Parlamento. En el bar del mismo nombre, en la calle Fray Isidoro de Sevilla, 6 un camarero de la cafetería ofrece dosis abundantes de guasa sevillana: “Aquí la gente ahora pide un café y yo le pregunto que si con sobre o sin sobre”. En el sumario de los ERE se certifican entregas de sobres en el bar El Parlamento, aunque no se especifica la cantidad.
El camarero, coqueteando con los cincuenta, no quiere desvelar su nombre y es un continuo chascarrillo. “Y yo les digo a esos de los ERE: ‘Mira que eres pobre que nada más que tienes dinero. Hay que ser pobre para estar sin amigos, sin compañía, sin juerga, es muy triste. Es de pobres sólo tener dinero”. Continúa con su copla particular: “Mira que soy desgraciado, que me tengo que esperar a morir para vivir bajo techado’”.
– Lo está grabando, apostilla su compañero, que recoge mesas y barre el local, de unos 80 metros cuadrados, refiriéndose al periodista.
– Me da igual, que grabe, le contesta.
Las ‘papas’ de Mar Moreno en el Bar El Parlamento
Y yo les digo a esos de los ERE: ‘Mira que eres pobre que nada más que tienes dinero. Hay que ser pobre para estar sin amigos, sin compañía, sin juergaEl bar El Parlamento, donde suelen acudirAlejandro Sanz, Raimundo Amador yManu Tenorio, cambió de dueño. Ya no está el que podría haber visto a Algarín o Lanzas trapichear con los sobres fraudulentos. Y ahora y antes ha sido un continuo trajín de políticos de todos los partidos. “¿Sabes aquí la presidenta del Parlamento que más ha disfrutado? No,Fuensanta Coves no; Mar Moreno, que se comía unas papas…”. Además de los “picatostes de la abuela”, una de las especialidades de la casa es la sartenada, compuesta por chorizo, “vinculado a la idiosincrasia de los que tenemos enfrente, por suerte o por desgracia…”.
En el centro del negocio hay un azulejo con una reproducción del Parlamento fechada en 1992 y debajo parece poner ERE. ¿Causalidad o premonición? “Yo no sé nada. Y si te engaño yo a ti, me engaño yo y eso no es vida. Lo mejor que hay es decir la verdad”, dice el dueño.
“Sevilla es cachondeo”, remata, antes de ponerse serio: “Esto de los ERE ha sido muy grave” .
– Manolito, dame un cafelito, le piden los clientes.
– ¿De qué lo quieres, de sobre o de máquina?