Ofrece un perfil institucional muy claro. También nada orgánico, muy lejos del aparatodel PSOE andaluz. Por eso, muy pocos pensaban que al final se iba a atrever. Luis Planas (Valencia, 1952), militante socialista desde hace 30 años, se presentará a las primarias del PSOE andaluz del próximo 29 de julio. El consejero de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta competirá con Susana Díaz “por convicción y responsabilidad”, como anunció ayer, y se aprovechará del descontento de los críticos para integrar una candidatura no oficialista que aspira a suceder a José Antonio Griñán al frente de la Presidencia de la Junta de Andalucía. El Comité Director, máximo órgano interno entre congresos, se reunirá hoy en Sevilla.
Planas lleva un año al frente de una macroconsejería técnica y jamás ha ofrecido síntomas de afición a las agrupaciones socialistas, a bajarse al terreno de lacaza y captura del voto. Lo suyo siempre ha sido el despacho oficial y la diplomacia (ha sido embajador en Marruecos y ante la Unión Europea). “No me gustan estos tecnócratas que luego aplican políticas neoliberales cuando tienen el poder absoluto. En el PSOE tenemos que estar muy esJoaquín Almunia y MAFO (Miguel Ángel Fernández Ordóñez)”, relata a El Confidencial un parlamentario andaluz.
El perfil de este político moderado con domicilio familiar en Córdoba es próximo al de Griñán y, por ende, en las antípodas de la esponja Díaz. Muy culto, domina el inglés y el francés a la perfección y es amigo del diálogo y del consenso antes que de la discusión y el enfrentamiento dialéctico. A eso le dedica muchas horas. “No soy blando”, ha llegado a asegurar el exembajador para intentar desterrar una presunta debilidad en la defensa de sus argumentos y fijación contundente de sus posiciones políticas.
