No funciona, está construida toda la infraestructura (4,7 kilómetros de norte a centro) y se ignora su futuro. El Tranvía de Jaén, que costó 120 millones de euros, uno de los mayores despilfarros de las infraestructuras españolas, ya tiene quien lo cuente. Un grupo de 30 personas, entre periodistas, técnicos y cuatro productoras han creado la serie documental web Tranvía Crucis, altavoz de los jiennenses para ofrecer ideas sobre qué se debería hacer con este transporte que, cuando estuvo en periodo de pruebas, apenas fue utilizado por 6.000 personas al día: para ser rentable debería contar con 13.000 usuarios.
Tranvía Crucis, grabada entre el 23 y 27 de septiembre de 2013 en las diez paradas del transporte, ya ha recibido más de 20.000 visitas y emitido tres capítulos, de 11 minutos de duración cada uno. Con un periodista/moderador local y dos invitados, cada uno con puntos de vista divergentes, no participa ningún político; sólo ciudadanos de la sociedad civil de Jaén, cuya provincia soporta una tasa de paro del 40% y la renta por habitante más baja de España.