Emilio Botín y César Alierta. La nómina de gerifaltes seguirá creciendo sin parar, y a todos ya les ha sacado tajada económica la presidenta de la Junta de Andalucía. Susana Díaz se ha marcado una cruzada “para captar grandes inversiones y crear empleo”, y para ello no duda en hacer caja con los grandes jefes del Ibex 35. “Tenemos que generar confianza en Andalucía”, argumentan a El Confidencial fuentes próximas a la jefa de Gobierno andaluz.
“Hasta ahora no se habían retratado, y la intención es que se mojencon nuestra tierra”, insisten estas mismas fuentes dejando entrever que el expresidente José Antonio Griñán, con un perfil claramente socialdemócrata,en contraste con Díaz, “muy de izquierdas”, como ella mismo se autodefinió, no hizo lo suficiente para convertirse en aliado estratégico de las grandes multinacionales españolas.
Los empresarios también se han visto sorprendidos por esta súbita alianza de Díaz. “Es algo novedoso y refleja un nuevo lenguaje y escenografía”, subrayan a este diario fuentes empresariales andaluzas. “Es evidente que la presidenta de la Junta intenta explorar nuevos terrenos, aunque yo creo que más bien lo hace porque a medio plazo se plantea sustituir a Rubalcaba”, añaden estas fuentes.