Susana Díaz no quería. La presidenta de la Junta rechazó el puesto de presidenta del PSOE, pero se lo ha entregado a Micaela Navarro, exconsejera de Igualdad con Manuel Chaves y José Antonio Griñán, y presidenta de los socialistas andaluces, que sucedió a la histórica Amparo Rubiales en noviembre de 2013.
El ‘fichaje’ de Navarro, que se convertirá en la primera mujer que presida el PSOE, refleja la falta de banquillo del socialismo español, aunque la jienense compatibilizará la presidencia nacional del PSOE con la de Andalucía, renunciando a la de Jaén.