Foto: Elmundo.es / AP
Tsutomu Yamaguchi sufrió la primera bomba atómica en un viaje de negocios. Poco después regresó a su casa y fue testigo de la segunda explosión. Gran historia. Hiroshima y Nagasaki , dos ciudades que conozco, que he pateado, que recuerdo a menudo. Nunca se pueden olvidar las caras desfiguradas por el holocausto nuclear y la alegría de los niños en el Parque de la Paz.
BANZAI!!!!!
Esto me recuerda la historia del ingeniero Enemon Kawaguki, que cuando estaba trabajando en su fábrica de Hiroshima, fue sorprendido por la agradable explosión atómica. Por caprichos del destino fue evacuado a Nagasaki para tratar sus quemaduras. Una vez allí volvió a tener la misma experiencia y volvió a sobrevivir. En 1957 murió con el cuerpo lleno de pústulas de cáncer atómico. Una triste historia.