Colaboraciones suspendidas o rebajadas (en todos los medios). Despidos (en Zeta, en La Gaceta de los Negocios…). Cierres de cabeceras (Teleindiscreta y más que llegarán). Fin de emisión (Localia). El drama del periodismo, de los medios de comunicación. En caída libre. Jodida crisis.
érase un director,
a un ego-periódico pegado.
éramos muchos, profesionales sumisos y fieros,
mucho recibir palos… y poco dinero.
érase un medio gigantesco,
que compraba, compraba y compraba,
un estilo a lo enrom.
Era yo quizás, otro gilipollas engañado,
que pensó que lo suyo jamás sería
recortado.
érase que durante la caída, no encuentro apoyos, cabos, gestos…
¿que he hecho mal?
acaso lo merezco…
érase su cabecera, un in-mundo basurero maloliente,
cebándose en causas perdidas, cotilleo o el 11m.
Y érase que allí el pez gordo
tapa sus fosas nasales a dos manos…
mientras los demás reciben las hostias, y cargan las culpas, pensando que no será en vano.
érase una familia de déspotas
de poco lustre, pero eso si, escolta y chofer abajo.
érase que aún recortan, asignando puestos «a dedo»,
antiguas deudas o favores que mejor me callo pero todos sabemos.
érase un error?
o más bien un mirarse el ombligo sucio y negro…
Era esta en tiempos una profesión digna,
que por arte de ambición, se han cargado estos mendas.
Dijeron que era la poca publicidad, la crisis, la política, la guerra…
Dicen tanto, y tan poco
que mejor leer a agustín y pasar de pagar 1 euro por estos piezas.