Relato un perfil más o menos provisional de Fernando Arcas, alternativa en el PSOE malagueño. Corre muchas tardes por la playa de La Malagueta. Juega al tenis muy bien. Como cuento en El Viaje de los Ingleses, fue figurante en la película de Banderas, compartiendo secuencia con Raúl Arévalo y Luisito Sanjuán, Antonio Soler, Pablo Aranda, Joaquín Ortega y Agustín Rivera.
Su profesión -profesor de Universidad- es vocacional. Es un apasionado de la Historia Contemporánea. Devorador de diarios, reconoce el papel de periódicos que no debe olvidar la memoria periodística de la ciudad: Sol de España y Diario 16 Málaga. Sabe escuchar muy bien y dar aplomo y comentarios atinados en las confidencias de madrugada y sobremesas sin prisa. Enseña Historia en la Facultad de Letras. En Periodismo. Y en los Cursos de Español para Extranjeros de la Avenida de Andalucía.
Tiene 54 años, nació en Córdoba, pero vive desde niño en Málaga. Estudió en el Colegio de San Estanislao, los Jesuitas de El Palo. Lee mucho, organiza cursos de verano (a finales de junio capitanea uno en Ronda en el que participarán Paul Preston, Soler, Rafael Ballesteros y Mark Aldrich) y no le gusta el protagonismo, pero si hay que asumir retos ahí está él. Como ahora. Se lo han pedido. Que encabezara una lista a la Secretaría General del PSOE malagueño. Soler dice de Arcas hoy en Sur: «Un socialista ejemplar, moderado y culto y con ansias regenadoras e integradoras». Apoyos no le faltan a Fernando Arcas. ¿Serán suficientes para desbancar a Heredia? Es hora de decidirse. Como dice Loma, son malos tiempos para los tibios.
Gran tipo Arcas, y gran amigo. Le deseo un buen futuro porque ya es hora que los intelectuales vuelvan al PSOE y no los frescos-catetos-pijos que hasta ahora andan por el partido (PENDÓN-MARISA-PACO CONEJO) y que a un compañero tuyo de doctorado lo tienen engañado y explotado laboralmente
El comentario anterior se descalifica por si mismo. Si alguien pretende reivindicar la necesidad de intelectuales mediante el insulto de otras personas demuestra muy poca cultura y educación. Creo sinceramente que esta no es la forma de debatir ni en el PSOE ni en la sociedad. Respeto a las personas. Respeto a las ideas contrarias y sobre todo respeto a la democracia.